sábado, 30 de junio de 2012

Quincuagésima carta de inauguración:

Presbíteros lectores:

                              me dirijo a ustedes para dar por inaugurada, otra vez, la página que servirá de bebé de probeta para los grandes acontecimientos neoepistemológicos que se presenten en lo que quede del año.

          "Sé que vos me amás, sabés que yo...." decía claramente el poeta beatnik, Allen Ginsberg, al referirse al consumo desmesurado de neófitos. Hoy, nosotros, no los consumiremos, los crearemos.

           Usted se preguntará ¿por qué?. Porque nos han iniciado para esto. Porque el poder del rayo y la flauta se nos ha dado para impulsar la renovación del arte actual. Porque somos los magos capaces de ver la realidad y transformarla en un bol o en un super bowl. Porque nuestras manos han sido forjadas con fuego y tierra. Porque nos han despojado de nuestras investiduras y nos han empujado al musgo infiel del sopor ignoto.

          Por eso, hoy, negamos lo que somos y nos entregamos a la guerra cruel y sangrienta del exterminio humano. Seremos todo lo otro. Lo artístico, el fuego azul del amo Sandaroth, la hernia de Barth y la volqueta triste que anida en la esquina. Hacia allá vamos y nos mandamos porque somos una porquería que no sirve para nada. Somos diferentes. Somos...

...como usted.


                                                         

                                                                         Saluda atte.    
                                                                LaHernia De Barth